Independientemente de su ocupación, posición social o género, cada persona puede ser conocedora en una esfera particular de conocimiento, pero generalmente es ignorante en medicina. Estamos acostumbrados a seguir las prescripciones de nuestro terapeuta sin dudarlo. Nunca nos hemos esforzado por investigar la forma en que funciona esta o aquella medicina… Pero, en realidad, incluso si lo hiciéramos, dudo que nos percatemos de lo que está escrito en los grandes libros de medicina. Parece que a veces valdría la pena hacerlo.
La investigación reciente en el campo del campo de la disfunción salival ha demostrado que más de 600 medicamentos ampliamente diseminados en la actualidad conducen a la caries dental a través de la inhibición de la saliva en nuestra boca. Mientras tanto, la saliva ejecuta una función importante en proteger nuestra boca del ácido que destruye los dientes. Este ácido es producido por las bacterias mientras usted come azúcar y destruye a la vez la capa superior de nuestros dientes. La salvia es rica en calcio y fosfato y, al fluir, reemplaza la capa que se ha eliminado.
La atropina, el propanolol, la clonidina y medicamentos similares a ellos ocupan el primer lugar entre los medicamentos dañinos para nuestros dientes. Estos medicamentos inhiben la producción de saliva o alteran su composición que es tan mala.
Los estudios realizados en ratas para ver la relación entre la incidencia de la cavidad, el flujo de salvia y los fármacos específicos, han demostrado que fármacos como la atropina y sus similitudes, incluidos los antihistamínicos (por ejemplo, Benedryl) y algunos antidepresivos (por ejemplo, Elavil, Aventyl), retardan el Proceso de secreción de salvia.
El propanolol, a su vez, altera la composición de la salvia causando la caries dental de esta manera. Se ha demostrado que el tercer fármaco bajo investigación, la clonidina, previene la producción de saliva mediante la conducción de neurotransmisores – estimuladores de las glándulas salivales.
Todo esto es triste, especialmente porque estos medicamentos son ampliamente utilizados por las personas mayores, junto con aquellos que tienen problemas de corazón o hipertensión. La clonidina, por cierto, se usa adicionalmente para tratar a niños con problemas de déficit de atención. El profesor Watson llama a los médicos para que reconsideren el uso de los medicamentos mencionados anteriormente, o que al menos piensen en la reducción de la dosis.